Manolo no sabe....

- Tengo que hacerte una pregunta, es importante para mí, así que ni se te ocurra reírte que ya nos conocemos.

Así empieza nuestra conversación, si su mujer, doña Puritana, está desmejorada desde que se separaron, él está aún peor, quizás no, quizás está mejor, no lo sé… Si lo miro bien, está mucho mejor, ha perdido la geometría, es decir, ha perdido esa barriguita o mejor dicho, esa barriga, vamos a ser sinceros y quitarle el “-ita” era barrigón, porque entre las cervecitas, las tapas, las comiditas de su mujer y la buena vida en el sofá, siempre que el perro se lo permitiera, claro… Había progresado, geométricamente, como decía su mujer.

Ahora tiene un vientre casi planito, además va al gimnasio, hace footing por las mañanas, se acabaron las comiditas preparadas con cariño, porque por mucho que el microondas te quiera… No es lo mismo… Nunca le pone tanto empeño a la salsita como se lo ponía su ex, que mal suena, “ex” … Pero así es, ahora es su ex… Exmujer, expareja, exdigustos, expeleas, exgritos… Eso nadie lo dice, aunque es así.

Manolo me ha citado en un bar cercano a mi casa, según él, tenía que hablar conmigo porque ha empezado a conocer mujeres y tiene una gran duda, no sabe donde tenemos una cosa… Que no sé cual será, porque vamos que yo sepa todas somos iguales, dos brazos, dos piernas, una cabeza, dos tetas, un c… Estoooo… Todas tenemos lo mismo que tiene su “ex”… Bueno todas no, algunas tenemos un poco de menos mala leche, aunque la cosa no anda muy desigual, no señor, pero un poquito menos que ella, seguro que si.

Está rojo, mira hacía la taza de café como si se le fuese a escapar si deja de vigilarla, intento no reírme, pero antes de que siga hablando ya tengo ganas de hacerlo, más que nada porque lo veo indefenso y tímido, ¡con lo grande que es!!! Me callo y espero a que continúe, con la mirada le digo que estoy escuchándolo, enciendo un cigarrillo para disimular mi sonrisa y él prosigue diciendo:

- A ver… Dime… Es que no sé como preguntártelo… - Coño, pues haciéndolo de una vez, pienso para mi, pero en cambio le digo

- ¿Qué te pasa? Pregunta lo que quieras, ya sabes que te voy a contestar… Total llevo años siendo Elena Francis para ti y para tu ex… - sonrío para infundirle confianza, esto debe ser muy gordo, sino no estaría pasándolo tan mal, hasta me da pena el pobre, estoy cada vez más intrigada… ¿Qué será eso que no sabe este hombre donde lo tenemos las mujeres?

- Bueno, allá va… ¿Dónde tenéis las mujeres el punto G? – Ostiaaaa, esto no me lo esperaba- Es que mucho se habla de eso y yo no sé donde está, vamos que a Puri no se lo encontré nunca… Claro que ella sólo se lo dejaba buscar algunas veces, pero eso sí, con la luz apagada y las bragas casi puestas… No te rías!!! Me has dicho que no te ibas a reír…!!!

No es que me ría, es que me va a dar algo… No le he escupido el café en plena cara de milagro… Es que estas cosas no se preguntan así, a bocajarro, sin avisar ni nada… Encima te pillan con la boca llena de café, no lo he escupido, pero me he atragantado, estoy tosiendo como una tuberculosa (el tabaco no tiene nada que ver eh??? No seáis mal pensados) ha sido el café y la impresión. Como puedo intento recomponerme, sentarme bien, dejar de toser y reírme al mismo tiempo, ponerme seria y contestarle:

- El punto de Gräfenberg, más conocido como punto G, llamado así en honor de su descubridor, el ginecólogo alemán Ernst Gräfenberg, es una pequeña zona del área genital de las mujeres localizada detrás del hueso púbico, la estimulación del punto G (a través de la pared frontal de la vagina) propicia un orgasmo más vigoroso y satisfactorio, a veces no es posible alcanzarlo con el pene, pero si con los dedos o la lengua… - se lo explico lo mejor que puedo, aunque por la cara que está poniendo no se si me ha entendido o no- si se estimula bien…

- Ehhhh paraaaaaa… A ver que eso es mu complicao… Además ¿Cómo coño lo descubrió ese tío? Porque habría que saber que hizo pa’descubrirlo ¿No???... ¿Con quién lo descubrió? ¿Con una paciente o con una rata en el laboratorio? Eh???

Está enfadado, es que este buen hombre cuando no entiende algo se enfada… Bien mirado razón no le falta, yo nunca me he preguntado cómo o con quién lo descubrió… ¿Con su mujer? ¿Con la enfermera? Seguro que un buen día estaba tomandose un café y pensó: “Hoy voy a descubrir donde tienen el punto G las mujeres” y zasss… Nada más entrar en el laboratorio, le metió mano a la rata y lo descubrió… Sonrió con estas cosas que se me ocurren pensar y Manolo como si me leyera el pensamiento sigue diciendo:

- Otra cosa muy importante, ¿sufragó el gobierno el estudio científico que llevó a la rata hasta el orgasmo?... Hablando en plata… ¿Quién pagó el polvo?.

¿Y cómo lo dio a conocer al resto de científicos y al público?.

–"Señores, acabo de descubrir un punto en el coño de la mujer que si lo tocas hace que se estremezca de placer"-.

Me duelen las mandíbulas de reírme, intento hablar y explicarle que las cosas no son así, que hay muchas mujeres que sabemos donde está ese punto, que muchos hombres lo encuentran sin necesidad de buscarlo, que es algo que todos tenemos… Pero no me deja hablar, una vez que se embala es como su ex, no hay quien lo calle…

- Mira, yo soy demasiado mal pensado, no voy a creer que ese punto estaba ahí esperando a que ese tío lo descubriese, lo que pasa que el mundo funciona así y a un orgasmo con la bata blanca puesta mira la cola que trae, que todo el mundo se lo cree y encima que le pagamos para que investigue cosas importantes y él se lo gasta en echar polvos por ahí… Encima seguro que le dieron algún premio, le reconocieron la labor bien hecha y hombre… Bien hecha si está… Lo que hay que reconocerle es que ese día tuvo una buena actuación…

No hay quien pueda, ni con él ni con ella, no se porque están separados si son los dos iguales… Con una sonrisa en los labios, le digo que tengo prisa (mentira, pero me duele la barriga de reírme) que ya seguiremos hablando, le doy un beso y al ir saliendo del bar le digo:

- Pues procura que tu actuación iguale a la del tío ese, como tú lo llamas, así te veré en algún telediario: “Manolo ha encontrado el punto G!!!! La dama está encantada con la experiencia!!! Mañana gran exclusiva en el programa de la Noria, demostración en directo” jajajajaja

Mª José