Odiado
señor Alzheimer, odiado si, durante años te he maldecido hasta la
saciedad, leí sobre ti todo lo que pude, aprendí hasta el más mínimo detalle sobre tu manera de apoderarte de los recuerdos de los
demás, como destruyes vidas lentamente, poco a poco, pero con mucha
maldad.
Te
quedas con lo que ha sido la vida de una persona, primero son
pequeños detalles; el día del mes en el que viven, otro día no les
dejas recordar si han comido o no, otro donde han puesto el bolso...
Cosas pequeñas para que los demás pensemos que son cosas de la
edad, no es así, eres tú que nos vas engañando hasta que se te va
la mano y los dejas sin recuerdos, hasta que los despojas de todo lo
que ha sido su vida.
Yo
te odiaba por haberle robado los recuerdos a mi madre, por no
permitir que fuera consciente del mundo que la rodea hasta el punto
de tener que llevarla a una residencia cuando le hiciste olvidar que
para caminar tenía que poner un pie delante de otro. Tú sabías que
ella no quería acabar sus días en ningún lugar así, que le
horrorizaba esa idea, pero te las apañaste para que esté allí.
Ahora
no se si te lo tengo que agradecer, fíjate bien en lo que te digo,
ahora pienso que quizás te equivocaste, si, ella está en una
residencia, sus recuerdos son muy pocos y confusos. Sin embargo ha
vuelto a aprender a caminar, está contenta y sobre todo no es
consciente de lo que estamos viviendo en estos días con el
Coronavirus, tal vez este sea un amigo tuyo, aunque este no tiene tu
paciencia, arrasa con todo por donde pasa.
Este
nos ha robado nuestra libertad ya que estamos confinados en nuestras
casas, la policía no nos permite salir tan solo hay algunas
excepciones, nos ha quitado la tranquilidad, no podemos hacer aquello
que a pesar de ser muy bonito a veces no le dábamos importancia; como
un beso o un abrazo, nos pone enfermos, a muchos hasta los está
matando y cuando mata a alguien se debe reír viendo como sufrimos al
saber que mueren solamente acompañados por él ya que no pueden
estar con la familia ni estos lo pueden acompañar para hacerles un
entierro digno.
Mi madre gracias a ti no se está enterando de nada de esto, sigue dentro de su mundo protegida y feliz. Nunca pensé que yo llegaría a pensar así, pero es que este confinamiento nos está haciendo replantearnos muchas cosas.
Mi madre gracias a ti no se está enterando de nada de esto, sigue dentro de su mundo protegida y feliz. Nunca pensé que yo llegaría a pensar así, pero es que este confinamiento nos está haciendo replantearnos muchas cosas.
Quiero
que sepas que en el fondo te sigo odiando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus comentarios me ayudarán a ecribir mejor cada día, todos los comentarios son constructivos.