Después
de tantos días sin vernos, por fin, tiene un día libre para comer
conmigo, que seguro que ha dejado a alguna plantada hoy, porque no sé
que tiene este hombre que está arrasando desde que se divorció,
vamos es como el Ave Fénix, ha resurgido, está hasta más joven
desde que es de nuevo soltero.
Por
fin doña Puritana ha firmado el convenio, eso sí ha conseguido casi
todo lo que quería, todo menos la mitad del sueldo de Manolo, pero
ha conseguido los mil quinientos, la pensión por Pedrito, la mitad
de la hipoteca y demás cosas, la mitad de los gastos del perro… El
régimen de visitas para el niño cada quince días, bueno para el
niño y para el perro, un fin de semana de cada dos se quedan con él,
aunque quizás haya sido mejor para su salud pagar todo esto y
librarse de doña Puritana, no estaban hechos el uno para el otro,
los dos son muy diferentes y su vida en común había llegado a su
fin, así de sencillo y de complicado.
Lástima
que Manolo no está por la labor de volver a casarse y divorciarse,
¡yo que le prometía no ponerle pegas al convenio de divorcio!, con
esas condiciones me conformaba, si es que una no es exigente!!!
Además ni siquiera iba a tener que pasear al perro, entre otras
cosas porque yo no tengo perro.
Está
algo alicaído, yo pienso que éste ha vuelto a dormir con la
ronquidos, seguro, seguro… Le pregunto que le ha pasado y me dice:
-
Es que mira, por mucho que uno no quiera, necesitamos una pareja y no
es nada fácil encontrarla, te lo aseguro… Todas se medio enamoran
de mí, pero después nada de nada chica –sonrío porque no sé a
donde quiere ir a parar y cuando una no sabe que decir sonreír es
una especie de comodín- primero consigues salir con esa chica que te
gusta, después te deja por otro, ya estás jodido otra vez, sales
con otras con las que sabes que no vas a tener futuro ninguno, pero
sales con ellas y cuando se acaba piensas: mierda he perdido el
tiempo y se te quitan las ganas de intentarlo de nuevo.
-
No siempre es así ¿No? –le respondo después de haber pensado
bien lo que me estaba diciendo- En algún momento llega esa persona
que te gusta, con la que estás bien, incluso con quien quieres
compartir tu vida.
-
Puede ser que si o puede ser que no, pero es cansado, siempre
comenzando desde el principio, a explicarle toda tu vida, las cosas
que te gustan, las que no, los hijos que tienes, el perro, el resto
de la familia, el porque te has divorciado, como es la bruja de doña
Puritana, en que trabajas, como vives… Uffff, se te quitan las
ganas, te lo aseguro.
-
Jajajajaja… Manolo eso no es tan complicado, hazte un currículo en
el cual pones todos tus gustos, medidas, como eres, el régimen de
visitas de Pedrito y el perro (que no haya malos entendidos después),
no olvides los ligues por orden cronológico… y cuando hables con
ella por primera vez le dices: “primero léetelo y después
hablamos, que yo paso de explicar el rollo una y otra vez –le digo
entre risas- eso sí no pongas en el currículo que tienes el tono de
psicosis en el móvil para las llamadas de tu ex, no es por nada,
pero no quedaría bien, Jajajajaja.
Mª
José
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