Manolo y las peliculas de miedo

- Anoche estuve con una chica que hace ya algunos días conocí – vaya, vaya ¿Con qué has ligado? Pensé- nos hemos acostado un par de veces… y ayer estuvimos viendo una película de miedo.
- ¿Le gustan las películas de miedo? ¿La llevaste al cine? – Habrá que ser cortés y preguntarle, ya que él está tan nervioso...
- Noooo, la vimos en casa, en el DVD... Una de Nacho Vidal...
- ¿De Nacho Vidal? Tú te has confundido de nombre chaval, a no ser que haya dos con el mismo nombre, el que yo conozco no hace películas de miedo precisamente eh??? – Vamos que seguro, seguro que se ha equivocado de nombre, que lo sé yo, que no hace pelis de miedo.

Manolo me mira sonriendo, está algo rojillo, no sé si es que le ha dado mucho el sol o es que le ha subido la tensión, que ya tiene cierta edad y hay que cuidarse... Aunque intento no preguntar, tengo mucha curiosidad por saber todos los detalles escabrosos de ella, “de la otra”, como diría su ex-mujer, pero la buena educación hace que me calle y siga con lo que él me está contando, aunque no me interesa saber los detalles de la película, pero él parece dispuesto a contarmelos... Las películas de miedo no son mi fuerte, no sé que nombre decirle que se parezca al de Nacho, porque está confundido, pero él sigue insistiendo en que no es así. 

- Que no, que era del Vidal la película, que estoy seguro... Que no tengo dudas... Que era del guaperas ese, bueno guaperas os parece a las mujeres, a los hombres no tanto, la verdad... – me dice con una sonrisa que le cubre toda la cara.
- Manolo no quiero discutir contigo, pero Vidal sólo hizo una película que no era porno, de Joaquín Oristrell titulada: “Va a ser que nadie es perfecto.” No era porno, pero era de risa, no de miedo... Que es un actor PORNOOO... – me altera la gente que me lleva la contraría cuando estoy segura de algo (cuando no lo estoy también, pero eso no se lo digo a nadie), él me mira riéndose, con una picara mirada me dice
- Era de miedo, te lo aseguro Mª José, las películas del Vidal son todas de miedo... Todas, todas... MIEDO QUE DAN LAS COMPARACIONESSS... –concluye con una sonora carcajada, sin darme la oportunidad de matarlo ni de saber más detalles de “la otra”.

Mª José